Un día
un día entenderás el dolor que causaste cuando el dolor de verme bien te atrape a ti.
Un día le pedí a la vida no volver a verte.
pedí que no volvieras a escuchar de mí.
que donde sea que la vida te tuviera, estuvieras bien.. contigo.. pero sin mi.
le pedí que si un día te acordabas de mi, te acordaras de como te fuiste, de como me dejaste, y del daño que causaste.
no le pedí que te la cobrara. pero si, que sí un día, de tantas vueltas que da la vida, tenías la suerte de volver a verme; me vieras en una vida en donde ya no cabes tu. feliz, riendo, gozando, cantando y soñando.
no sería un castigo, sería un regalo.
y hoy 4 años después me viste. con la misma ilusión que me robaste, la alegría que rompiste y los sueños que te llevaste.
la vida siempre siempre vuelve a ponerte de frente a las personas que un día quisieron verte mal, pero con la suerte de verte bien. porque como alguien dijo ‘el pecado hace su propio infierno y la bondad hace su propio cielo’.
un día entenderás el dolor que causaste cuando el dolor de verme bien te atrape a ti.
la gente paga por lo que ha hecho y por aquello en lo que se ha convertido. y se paga de manera simple: con la vida que llevan,
en una vida sin ti.
hoy me pregunto en qué consiste el destino, en recibir lo que mereces o en merecer lo que recibes?
como sea, hoy otra vez vuelvo a pedirle a la vida, no volver a verte,
no volver a vernos.
Sofia Cifuentes